Por: María Elena Orozco
Aquí les presentamos como un digno homenaje, algunas fotos del Dr Francisco Prat Puig nuestro paradigma y Maestro.
Unas hablan de su trabajo como arqueólogo en la ciudad de Agde, Francia, en el que siendo un refugiado español, después del fracaso de la II República, subvirtió esa condición y descubrió una ruinas de una antigua ciudad itálica; especialista y profesor de Historia del Arte, conservador del patrimonio:
A él se deben restauraciones como la de el Castillo del Morro, la llamada Casa de Velázquez; la Casa de los Maceo, de los hermanos País y tantas acciones en el recate de nuestra identidad.
Hace un año Jean Lamore, Yaumara López y yo escribimos un trabajo que titulamos: «Francisco Prat Puig, ese catalán que llegó a pensar en cubano«, porque Prat adoró su tierra, su natal Cataluña pero comprendió nuestro ser, no sólo porque obtuvo la nacionalidad cubana en 1940 sino porque amo Cuba y adoptó Santiago de Cuba como suya, a la que dedicó gran parte de su vida desde que en 1947 formara parte del claustro fundador de la Universidad de Oriente.
Allá en las alturas de Quintero propusiera el lema tan hermoso de «Ciencia y Conciencia» que hoy sigue brillando en nuestra querida universidad aguerrida y mambisa.
Estas fotos jalonan su huella imborrable por varios lugares y, especialmente, por la Universidad que tanto amó y defendió.
Siempre entre nosotros querido e inolvidable Maestro: Francisco Prat Puig.