Una historia de Vida del hombre contada contada por la tierra

La historia del hombre contada por la tierra en el municipio Tercer Frente de Santiago de Cuba

Por: Javier Labrada García
Santiago de Cuba, CMKC, Radio Revolución
, Una historia de Vida.- Adisneida Días y Miguel Hernández constituyen un matrimonio, que desde el mes de diciembre de 2019 reside en la comunidad Santa Rosa, Cruce de los Baños, municipio Tercer Frente.

Desde mucho antes culminar su vivienda comenzaron a sembrar alimentos, y así, ya han cosechado yuca, boniato, plátano burro, frijoles y poseen- además- una hortaliza con ajoporro, orégano, clavo canela y plantas medicinales.

Con 21 años de casados y una hija de 16 años, aseguran que en el hogar son uno solo; ambos se complementan y apuestan por la diversidad de criterios. #Cuba #CubaSalva #SantiagodeCuba #SomosTercerFrente

El actual Programa de la Agricultura Urbana y Suburbana de Cuba se inició el 27 de diciembre de 1987 con las indicaciones del General de Ejército Raúl Castro Ruz entonces Ministro de las FAR al mostrársele una producción de hortalizas en canteros enriquecidos con materia orgánica en HORTIFAR 1, La Lisa. ¨Debemos desarrollar y analizar este método de cultivo¨, señaló.

En estos 27 años se ha consolidado un Movimiento Productivo Extensionista para impulsar la producción de alimentos el cual ha transitado por 3 etapas en su desarrollo.

Una historia de Vida ante la covid-19 desde la Sierra Maestra

La historia del hombre contada por la tierra en el municipio Tercer Frente de Santiago de Cuba
La historia del hombre contada por la tierra en el municipio Tercer Frente
de Santiago de Cuba

a) Los Organopónicos y Huertos Intensivos, Patios y Parcelas hasta 1997.
b) La Agricultura Urbana desde 27 de diciembre de 1997.
c) La incorporación de la Agricultura Suburbana desde abril del 2009 adquiriendo el Movimiento de nombre Agricultura Urbana y Suburbana, genuina representante de lo que hoy se le llama Agricultura Familiar

En Tercer Frente Casas de Cultivo semi rústica para la producción de alimentos

En el país existen alrededor de 110 hectáreas de módulos de cultivos protegidos, cuyo objetivo fundamental es producir hortalizas como tomate, pimiento, pepino, zanahoria y melón, entre otros y el 80-85 % de esas cosechas de estas tecnologías tiene como destino las ventas al turismo, como una vía para sustituir las importaciones de estos productos.

Desde hace algún tiempo, refirió, a lo largo del archipiélago se inició un proceso de recuperación de estas instalaciones, que en varios momentos fueron afectadas por diferentes causas, sobre todo fenómenos hidrometeorológicos severos, además de que en los últimos años el país no ha podido garantizar las piezas, partes y agregados requeridos para su renovación.

Durante 2019, en esa recuperación se incluyeron varias casas de cultivos, incluidas las  ubicadas en La Habana, para la cuales se aseguraron los recursos indispensables y se trabajó por rescatar unas 30 naves de producción de posturas, en las que se alcanzan mejores resultados en el proceso de obtención de simientes.

De acuerdo con Rosales, no es lo mismo lograr las posturas bajo cielo abierto, donde puede incidir, por ejemplo, la lluvia, y ocasionar arrastres de las semillas, que en las condiciones de una nave con la tecnología indicada: bajo techo, en bandejas y con un sustrato conformado por una mezcla de materia orgánica enriquecida con carboncillo, que propicia un elevado vigor de las posturas.

“Estamos en proceso de recuperación de estos sistemas y la política es que una vez terminadas las reparaciones y completamiento de estructuras, partes y piezas de las existentes, en el país se puedan ir incrementando las casas de cultivo”, destacó el directivo del Ministerio de la Agricultura.

Crece la agricultura urbana, suburbana y familiar

Ventajas

No son pocas las ventajas de la producción en las casas de cultivo, introducida experimentalmente en Cuba en la década de los 80 del pasado siglo y extendida en el decenio siguiente, aunque estas demandan de productos para elevar los rendimientos y controlar las plagas, además de un estricto respeto por la disciplina tecnológica.

En estas instalaciones, donde los techos y laterales protegen los sembradíos y reducen el impacto de la radiación solar, se pueden producir hortalizas en un ambiente controlado durante todo el año, con elevados rendimientos. Además, dan la posibilidad de obtener variedades que no exhiben buenos resultados a cielo abierto.

Igualmente, tienen la ventaja  de ser operables por pequeños y medianos productores, emplear la tecnología de riego de agua localizado junto al fertilizante, con lo cual se obtienen frutos muy sanos de enero a diciembre.   La productividad de estas instalaciones se sustenta en la estrategia del manejo de su labranza, de manera tal que no haya afectaciones por los organismos nocivos y sea eficiente el uso de plaguicidas, además de impedir la contaminación del ambiente.

A juicio de Alfonso Silva, los productores deben llegar al convencimiento de la necesidad de ahorrar los recursos. Para eso, en Las Piedras, en las casas de cultivos están instalados un regómetro y un lisímetro. El primero, mide el agua que recibe cada planta; mientras el segundo, el fertilizante, lo que permite medir la eficiencia del riego y del uso de los fertilizantes y lo que asimiló la planta.

Aunque en un inicio la gente no quería, ahora se han convencido. Con esto, sostiene el productor de avanzada, se ahorra entre 30-40 %, no se echa agua por gusto y se controla la economía.

Por otra parte, en la finca defienden el uso de la materia orgánica mezclada con gallinaza y carboncillo, con el objetivo de recuperar el suelo. Todas esas características y condiciones posibilitan, en mucho menor espacio, obtener rendimientos superiores a los que se logran con la agricultura tradicional extensiva.

Casas rústicas para mejorar rendimientos agrícolas
Casas rústicas para mejorar rendimientos agrícolas

Trabaja Contramaestre por la siembra tabacalera en 120 hectáreas, a pesar de afectaciones por Eta

Al mal tiempo, lo criollo

Una de las variantes a las que ha acudido el sector ante la imposibilidad de importar todos los recursos necesarios para renovar las casas existentes e incrementar la cifra, ha sido la edificación de casas rústicas, una modalidad que ya fue utilizada a finales de los años 90.

“Como alternativas se está utilizando madera para la construcción, pues debido a la situación financiera del país no podemos pensar que todo lo podemos hacer con la tecnología completa que lleva el sistema. Entonces, entre los productores élite se han levantado este tipo de instalaciones, para que los agricultores cercanos vean la posibilidad de adoptar esta salida”, explicó.

Aunque es incipiente, este proceso se está llevando a cabo no solo en La Habana, como es el caso del productor Alexander Alfonso Silva, sino también en otras provincias para ir incrementando estas edificaciones, como una solución a la situación que tiene hoy la nación, destacó Rosell.

De acuerdo con Alfonso Silva, “se trata de adecuarnos a lo que tenemos a mano e importar lo menos posible. Una casa de madera de 400 metros cuadrados ronda entre 37 000 y 45 000 pesos, mientras una importada, no baja de 6 000, en moneda fuerte”.

Según el director nacional de agricultura, esta experiencia ha avanzado también en otras provincias, entre esas Ciego de Ávila, Matanzas y Granma.

Casas rústicas para mejorar rendimientos agrícolas
Casas rústicas para mejorar rendimientos agrícolas. Foto: Camilo Gonzalez Guerra
Seguridad alimentaria por la soberanía nutricional
y con apoyo científico en Santiago de Cuba

En tiempos de desarrollo del turismo y de cambio climático, el país requiere extender los  sistemas de cultivo protegido como una opción que ha demostrado que vale la pena, en el camino hacia la seguridad alimentaria.

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