Audio: Oscar Ignacio Ruano Chávez
Calibán Teatro– Las redes sociales se convierten en el verdadero escenario en tiempo de pandemia para muchas expresiones artísticas, entre ellas, el teatro, por eso dramaturgos y actores santiagueros consideran éste su nuevo y muy fructífero escenario virtual.
El busca del actor perdido, nuevo libro de teatro
Así se expande en las redes sociales Grupo Calibán Teatro de Santiago de Cuba, dirigido por el joven actor Maikel Eduardo.
Calibán Teatro presenta la segunda temporada en las redes de «Cita con la Poesía», con la intención de mostrar otra de las facetas del trabajo que realiza nuestro grupo.
En esta ocasión esta dedicada a la poesía amorosa de Jose Martí.
Interesante propuesta de Calibán Teatro
Publicado por Artes Escenicas Santiago De Cuba en Sábado, 6 de febrero de 2021
Elenco: Maikel Eduardo, actor y director del Grupo Calibán Teatro y las actrices: Claudia Valdés y Karina Alcina.
Esperamos que lo disfruten y que regresen el próximo encuentroUn poema es la mejor medicina para alimentar el alma.
Calíbán Teatro, una de las agrupaciones que se distingue sobre las tablas santiagueras por el elevado lirismo de sus puestas.
Nacido con un grupo proveniente del Cabildo Teatral Santiago -protagonista del rescate y enriquecimiento del teatro popular en Cuba-, volvió a la interpretación de los clásicos nacionales y universales para darle un giro renovador al quehacer teatral de la ciudad.
En Calíbán Teatro, la narrativa oral, la poesía y la música se funden desde 1986 en el trabajo del elenco construyendo su discurso sobre personajes y obras que han marcado hitos en las letras y la dramaturgia.
Así, del histrionismo de sus actores hasta los escenarios han llegado Buesa, el poeta; Yepeto, Hamlet, Jacques Hippolite, y ahora el hidalgo de la figura enjuta y Sancho Panza, para ofrecer entramados atractivos y con guiños sobre la identidad de la Isla.
Maquillaje, máscaras, la escenografía y la música de Calíbán Teatro acercan el entramado al público, bajo la dirección artística de Ramiro Herrero y Orlando González.
Alma máter de Carlos Padrón, Dagoberto Gainza, Nancy Campos y Ruth Escalona, entre otras glorias de la actuación en Cuba, Calíbán Teatro ha recibido numerosos premios y reconocimientos por su aporte al desarrollo de la cultura nacional desde las tablas, la acción comunitaria y la enseñanza del arte dramático.
Caliban o Calibán
Se trata de un Anagrama formado a partir del vocablo caníbal (que tiene su origen en el indoamericanismo caribe).
Caliban es uno de los personajes centrales de la tragedia La tempestad, última pieza escrita por el dramaturgo inglés William Shakespeare.
La obra toma como asunto la venganza de Próspero, legítimo duque de Milán, quien, tras ser desterrado por su propio hermano y condenado a navegar sin rumbo, llega a las costas de una isla desconocida, acompañado por su pequeña hija, Miranda.
Allí somete a Ariel, espíritu aéreo que había sufrido martirio por parte de la bruja Sycorax, y a Caliban, hijo de la hechicera.
Después de dar muerte a la bruja, Próspero convierte en sirvientes suyos a Ariel y a Caliban, a quienes instruye en su lengua y transmite sus conocimientos.
Ariel sirve fielmente a su amo, mientras que Caliban lo maldice de manera incesante, reclamando los que considera sus derechos sobre la isla, y pretendiendo a Miranda.
Pensamiento caribeño en el siglo XX
El pensamiento caribeño recupera durante el siglo XX la relación Próspero-Ariel-Caliban y la reposiciona como vórtice en la caracterización del sujeto antillano, a partir de la relación colonizador-colonizado. En ese debate se trata de establecer identidades a partir de la relación de los sujetos dominados con el dominador.
La polémica sobre el tema tiene un primer fermento en textos paradigmáticos del siglo XIX, entre ellos Facundo, o civilización y barbarie (de Domingo Faustino Sarmiento), Nuestra América (de José Martí), y Ariel (de José Enrique Rodó), que exhiben un marcado afán identitario; pero solo en el último aparece referida una identidad cultural a partir de un personaje shakesperiano.
José Enrique Rodó sitúa a Ariel, y con él al sujeto ilustrado, como paradigma intelectual del hombre latinoamericano, mientras que personifica en Caliban la amenaza de los Estados Unidos para la América.